La idea central en el diseño gráfico, es
la comunicación de ideas. Ideas que son organizadas, a través de la
utilización de imágenes, en las cuales se busca combinar el arte con aspectos
tipográficos.
O sea, palabras o texto escrito, que en conjunción con lo
visual, buscan el emitir un mensaje claro y directo. Es por medio de estos
mensajes, que por lo general, mediante el diseño gráfico, se crean campañas
publicitarias.
Campañas, que son utilizadas, por parte de organismos
privados o públicos. Y es que el diseño gráfico, tiende, como se mencionó
anteriormente, a emitir mensajes o a comunicar. Por ende, organismos
gubernamentales, utilizarán el diseño gráfico, para poder expresar campañas que
tienen como receptor, al ciudadano en general.
Por otra parte, tenemos al diseño gráfico, que es utilizado
por parte de las empresas privadas. Las cuales lo utilizan, para poder
incrementar sus ventas o mejorar su imagen corporativa. Es así, como el diseño
gráfico, puede ser utilizado, por parte de los departamentos de marketing, para
efecto de ventas. Y con respecto de la imagen corporativa, será el departamento
de comunicaciones corporativas, preocupado de la comunicación interna y externa,
quien verá en el diseño gráfico, una herramienta de gran utilidad, para
comunicar los mensajes inherentes de la organización.
Con respecto a la historia del diseño gráfico, este se
comienza a considerar como tal, ya avanzado el siglo XIX. Aún así, ciertos
especialistas en la materia del diseño gráfico, creen verlo de manera incipiente en algunas de las
pinturas rupestres, realizadas por los seres humanos, que habitaron la era del
Paleolítico. Esta apreciación, ha sido una manera válida, de valorar lo
realizado por estos seres humanos, los cuales tenían una concepción, bastante
rudimentaria, de su realidad y su vida.
Incluso, obras artísticas, mezcladas con la escritura, como
la Biblia hecha a mano por monjes irlandeses en el siglo IX, llamado el libro de
Kells han sido consideradas, como expresiones válidas, de lo que hoy
en día se considera como diseño gráfico.
Pero el diseño gráfico, alcanza su niñez real, luego de la
invención de la imprenta. Es así como continúo el desarrollo del diseño gráfico, hasta
que se lleva a cabo la separación entre Bellas Artes y Arte Aplicada, en el
siglo XIX.
Claro que la madurez del diseño gráfico, no ocurriría hasta
que se iniciara el siglo XX. Donde se logra desarrollar el diseño gráfico, como
se conoce actualmente. Gradualmente, el diseño gráfico, se tornado más sobrio, que
las tendencias que precedieron el siglo XX y XXI. Antiguamente, se le daba mucho
valor, a todo lo netamente artístico. Donde la tipografía, era una expresión más
de la idea artística, que se deseaba imprimir.
Pero con la llegada de la tecnología, los ordenadores y la
inclusión de software y hardware, en la producción misma del diseño gráfico, se
termina por adoptar una visión más práctica y efectista en este campo.
De todas maneras, han existido gritos de contrariedad, frente
a esta línea más ligada a lo netamente productivo. Gritos, los cuales, han
buscado que el diseño gráfico, tienda nuevamente a estar más cercano al arte que a los efectos.
Incluso, en ciertos casos, se ha buscado que el diseño gráfico, de un vuelco más
radical, hacia lo visual, dejando de lado la parte tipográfica.
En cuanto a una profesión, el diseño gráfico, debe ser
desarrollado, por personas que manejen conceptos claros, para trabajar con la
presentación visual y el ordenamiento de este punto, con lo tipográfico, para
entregar al final de su trabajo, un mensaje claro y entendible, para el público
objetivo del mismo. Por ende, con el diseño gráfico, no se trabaja solamente con
palabras y efectos visuales por separado. Sino que con ambos, de manera conjunta
y paralela, para crear un mensaje efectivo, primordialmente, pero que debido a
su belleza o concepto que representa, llama la atención del público. Ya que de no ser así, las personas no
se detendrán, por más penetrador que sea el mensaje, a mirar lo que se quiere
comunicar. Las cosas para el ser humano, entran por la vista, concepto que
manejan a la perfección los diseñadores gráficos, que son quienes dan vida al mundo del
diseño gráfico.